INTRODUCCIÖN
Es un documento solemne y apócrifo que se desconoce el autor y la persona que lo escribió. Apareció alrededor del siglo VIII donde se le atribuye a Constantino la donación de la ciudad de Roma, los territorios de Italia y el Imperio de Occidente al papa Silvestre I, haciéndose conocido como DONATIO CONSTANTINI o “Constitutum domini Constantini imperatoris” (ec.aciprensa.com/wiki/Donación_de_Constantino) dando origen al “Patrimonio de San Pedro”
1. ¿Qué contiene este documento?
Se divide en dos partes: “En la primera (titulada "Confessio") el emperador relata cómo Silvestre lo instruyó en la fe cristiana, hace una completa profesión fe y cuenta de su bautismo por ese Papa en Roma, y cómo de este modo se curó de lepra.” (ec.aciprensa.com/wiki/Donación_de_Constantino) En la segunda parte (titulada la “Donatio”) presenta una postura de Constantino y el Imperio Romano hacia el Papa Silvestre I, con respecto a tener la gloria, la supremacía, la eminencia, a los sucesores de Pedro y a los sacerdotes que sirven a la Iglesia Católica Romana y solicita también que estén en sujeción a la jurisdicción de la iglesia de Roma, las demás sedes eminentes de Antioquia, Jerusalén, Alejandría y Constantinopla; que sea gobernada por uno solo obispo romano, la cual tenga autoridad para decidir el culto y lo que sea necesario para la adoración de Dios. Se le entregaba también en las manos pontificias el palacio imperial de Letrán, las insignias imperiales de Roma. “Se dijo que Constantino depositó el documento sobre el cuerpo de san Pedro, con el carácter de un regalo personal.” (Paul Johnson, Historia del Cristianismo, pág. 352) “...Hemos acordado a las iglesias de los santos Apóstoles Pedro y Pablo rentas de posesiones, para que siempre estén encendidas las luces y estén enriquecidas de formas varias; aparte, por nuestra benevolencia, con decreto de nuestra sagrada voluntad imperial hemos concedido tierras en Occidente y en Oriente, hacia el norte y hacia el sur, a saber en Judea, en Tracia, en Grecia, en Asia, en Africa y en Italia y en varias islas, con la condición de que sean gobernadas por nuestro santísimo padre el sumo pontífice Silvestre y de sus sucesores” (Compilador: Jaime Morales, Guía del curso Historia de la Iglesia Medieval (SIGLOS VXV), pág. 78)
Así mismo también el emperador pide establecer su gobierno imperial a Oriente en la ciudad de Bizancio y fundar una ciudad con su nombre donde ellos puedan seguir gobernando y sostiene que este decreto debe de sujetarse tanto gobernantes como creyentes hasta tiempo indefinido.
2. Sus Orígenes
Se desconoce la fecha exacta del escrito, ya que fue cuestionada por el humanista Lorenzo Vaya en la edad media en el año 1440 que concluía que no podría a ver sido fechado en el año 300, la supuesta fecha data de “ 30 de Marzo del año 315” (Paul Johnson, Historia del Cristianismo, pág. 351) “En la década de 1450 Lorenzo di Valla, secretario del papa Nicolás V, demostró que la Donación de Constantino y muchos otros textos esenciales eran falsificaciones. Creó y popularizó nuevas técnicas destinadas a facilitar la evaluación crítica de la literatura sacra.” (Paul Johnson, Historia del Cristianismo, pág. 532) 3. El desarrollo histórico alrededor de la Donación de Constantino. La Donación de Constantino se hizo a fin de crear una justificación del poder pontificio de Roma sobre encima de los demás patriarcas, de esta manera también que fuera honrada la Sede como si se honrara al imperio. Le daba al pontífice un poder tanto espiritual, temporal y político.
Esta carta apócrifa de la donación de Constantino fue mencionada por el papa Leon IX un papa que se identificaba con las *reforma cluniacense, fue quien reorganizó la curia romana conforme al modelo imperial. Fue en los tiempos del Papa Leon IX cuando las decretales o legados pontificios tuvieron mucha relevancia para reafirmar una política territorial papal. “Mientras tanto, los normandos, que provenían del norte europeo, fueron expandiéndose y desarrollando una importante presencia en el sur de Italia. Entre otras cosas lograron desplazar a los musulmanes de Sicilia y, a menudo, a los bizantinos del sur de la península Itálica. El papa, receloso y preocupado por esta presencia no deseada, consideró que era hora de darles un aviso. Reunió tropas y él mismo se puso al frente de ellas, pero los normandos les castigaron severamente y mantuvieron prisionero al papa durante nueve meses (1053), aunque rodeado de todas las delicadezas posibles.
Fue entonces cuando invocó el papa por primera vez la Donación de Constantino, con el fin de definir jurídicamente el patrimonio de San Pedro y actuar como señor de territorios que en ese momento estaban ocupados por otros soberanos.” (Juan Maria Laboa Gallego, Historia de los Papas, pág. 116-117) “El movimiento de Cluny hizo notables progresos en la Italia del sur, lo que causó vivo descontento en la Iglesia oriental. Por otra parte, León IX estaba convencido de lo bien fundado de los motivos de su intervención política en los asuntos. Hallamos alusión, en los mensajes cruzados entre el Papa y el patriarca de Constantinopla (Miguel Cerulario), a la famosa Donación de Constantino (Donatio Constantini) (…)” (Alexander A. Vasiliev, Historia del Imperio Bizantino. Tomo I, pág. 296)
CONCLUSION:
La Donación de Constantino es reconocido por la Iglesia Católica Romana como un documento espurio y a base de este documento también se falsificaron otros como las decretales seudoisirodianos, (donde se afirma el derecho canónico medieval) tratando de alegar algún reconocimiento en base a la supremacía papal de Roma tratando de favorecer perpetuamente su señorío.
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